domingo, 2 de abril de 2017

Otro que se nos va



Hoy le toca a Salvador Pániker, un hombre hablador, impúdico, culto, lo más parecido a lo que yo entiendo como un sabio de estos tiempos.

Era la compleja combinación de unas circunstancias familiares, un entorno social, una curiosidad intelectual y una inigualable capacidad... y todo ello salpimentado con un brillante ego. Tal vez solo algunos genios pueden mantener ese tinglado cuando parten de una situación de élite y continúan generando fulgor.

Tengo mucho que agradecerle por lo que directamente me ha enseñado, y mucho más aun por todo lo que me ha sugerido. Ha sido una influencia capital.

Muchas gracias por todo, Maestro. Nos veremos