viernes, 13 de junio de 2014

De El Sebrayu a Pola de Siero


Estuve dándole muchas vueltas anoche ¿Por Oviedo o por Gijón? 

Realmente, el tema de las cuestas no es tan importante, aunque en el primero se concentran en menos distancia horizontal.

La decisión es inevitable por lo mucho que hay que ver (volver a ver) en Oviedo y por la posibilidad de visitar San Salvador de Valdediós, que no conocía. La mayoría de gente que se ha ido concentrando temprano alrededor de Villaviciosa ha tirado directamente por la costa de Gijón, así que, una vez más, toda la jornada sin nadie.

La belleza de Valdediós bien vale el esfuerzo, que ha sido mucho, no solo porque he pasado de los 35 km, sino porque las rampas de después del monasterio eran tan duras que había que tratarlas como si fueran escaleras. Tanta subida en tan poca distancia hace que el resto de la ruta sea una larga y suave bajada, tanto que aun sobraba energía para sobrepasar 9 km más sobre Vega de Sariego, que es el final lógico de la etapa.

Y aquí estoy, muy cansado pero con el regusto de haber metido muchas cosas por los ojos, y esas se quedarán siempre conmigo.

Mañana directamente a Oviedo, que está aquí cerquita. 
Buen Camino.


Esta rodilla... Creo que tendré que levantar un poco el pie.

2 comentarios:

  1. no te veo yo a ti aflojando el paso conforme te vas acercando a Galicia!
    CONTROLA PAPÁ, era así no? :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Canalla rencoroso, o sólo buena memoria. En cualquier caso, gracias por la recomendación.

      Eliminar